A veces, los recuerdos se esconden al fondo... muy al fondo del baúl.
Haces memoria y no los hayas.
Cierras los ojos y no los ves.
Pasa el tiempo sin la presencia de ellos.
Haces tu vida y no deparas en tu pasado.
En tu antigua vida.
En tu niñez.
En tu infancia...
....Parece como si todo se hubiera borrado... como si se hubieran ido al olvido...
Miras hacia el frente y nunca hacia atrás porque el tiempo te atropella... te arrastra...
Pero un día, sin esperarlo, hay algo que te hace desconectar del presente y viajar por tus recuerdos más profundos... aquellos que creías olvidados... Te estremeces... a partir de un recuerdo, van saliendo encadenados otros y otros y los vives como si fuesen de ayer... Disfrutas compartiéndolos con alguien que los vivió contigo... Te emocionas... aquí te das cuenta lo rápido que ha pasado el tiempo y lo veloz que el recuerdo olvida...
Una lágrima se escapa y consigues recordar el olvido... Ahora puedes recordar cosas olvidadas y vivirlas, y hacerlas presente para que no vuelvan a perderse en el baúl del olvido.
Sabes, hay veces que es bello detenerse y mirar hacia atrás y ver lo que fuistes... lo que sentistes, lo que quisistes, lo que odiastes, lo que admirastes...
El recuerdo es bello y más bello se hace aún cuando lo compartes con los viejos amigos de la infancia.
